Resumen
Durante la primera reseña de gobierno comunista en el mundo, dada en la Rusia de los años 20, se promulga la defensa y el fomento del arte cinematográfico como arma de adoctrinamiento y concienciación. Se crea así una escuela de jóvenes directores que desarrollará el cine, desde su estilo más primitivo y teatral hasta su consolidación como disciplina artística propia. Nos encontramos ante la etapa del cine mudo soviético, representado principalmente por los cineastas Lev Kuleshov, Dziga Vertov, Vsévolod Pudovkin y Serguéi Eisenstein. Estos autores estudiarán el estilo de la creación cinematográfica llevada a cabo en el mundo hasta sus días, experimentarán en la materia, realizarán sus propias películas para contrastar sus hipótesis y, finalmente, redactarán artículos y libros teóricos sobre cómo hacer cine. En concreto, será Eisenstein la figura más representativa: su producción fílmica y teórica profundizarán acerca de las posibilidades creativas que nos ofrece la cinematografía, concibiendo finalmente el montaje intelectual. Los escritos de esta escuela, los mismos que hoy heredamos y estudiamos, otorgan una especial importancia a la fase del montaje en la producción de una película, defendiéndola como el motor creativo que eleva al cine al nivel de arte.
Abstract
During the first review of the communist government in the world, given in Russia in the 1920s, the defence and promotion of cinematographic art as a weapon of indoctrination and awareness was promulgated. Founding, in this way, a school of young directors that were going to develop cinema, from its most primitive and theatrical style to its consolidation as an artistic discipline. This is the Soviet silent cinema, mainly represented by the filmmakers Lev Kuleshov, Dziga Vertov, Vsévolod Pudovkin and Serguéi Eisenstein. These authors will study the cinematographic creation style carried out in the world up to their days, they will experiment in the matter, they will make their own films to contrast their hypotheses and, finally, they will write articles and theoretical books about how to make cinema. In particular, Eisenstein will be the most representative figure: his filmic and theoretical production will delve into the creative possibilities offered by cinematography, finally conceiving the intellectual montage The theory of this school, the same one we inherited and study today, gives special importance to the editing phase of film production, defending it as the creative engine that raises the cinema to the level of art.